martes, 31 de octubre de 2023

Fuego - Joy Harjo

FUEGO
una mujer no puede sobrevivir
con su propio aliento
sola
debe conocer
las voces de las montañas
debe reconocer
la eternidad del cielo azul
debe fluir
con los inasibles
cuerpos
de los vientos nocturnos
que la llevarán
hacia sí misma

mírame
no soy una mujer aislada
soy una prolongación
del cielo azul
soy la garganta
de las montañas
un viento nocturno
que arde
con cada bocanada de aire
que respira.
Versión de Jonio González

lunes, 23 de octubre de 2023

Fragmentos de East Coker - T. S. Eliot

EAST COKER
(...)
Hay, nos parece, a lo sumo un valor limitado
en el conocimiento que se deriva de la experiencia.
El conocimiento impone un diseño y falsifica,
porque el diseño es nuevo a cada instante
y cada instante, una nueva y estremecedora
valoración de cuanto hemos sido.
(...)
La única sabiduría que podemos esperar adquirir
es la sabiduría de la humildad:
La humildad es infinita.
(...)
Para llegar ahí,
para llegar adonde estás,
para salir desde donde no estás,
debes ir por un camino en el que no hay éxtasis.
Para llegar a lo que no sabes
debes ir por un camino que es el de la ignorancia.
Para poseer lo que no posees
debes ir por el camino de la desposesión.
Para llegar a lo que no eres
debes ir por el camino en el que no eres.
Y lo único que sabes es lo que no sabes
y lo único que posees es lo que no posees
y en donde estás es en donde no estás.
(...)
En el desorden general
de la inexactitud del sentimiento,
escuadras de la emoción sin disciplina.

Y lo que debe ser conquistado
mediante fuerza y sumisión,
ya ha sido descubierto, una, dos, varias veces,
por hombres que uno no tiene esperanza de emular,
pero no hay competencia:
solo existe la lucha por recobrar lo perdido
y encontrado y perdido una vez y otra vez
y ahora en condiciones impropicias.
O quizá no hay ganancia ni pérdida:
 
Para nosotros solo existe el intento.
Lo demás no es asunto nuestro.

sábado, 7 de octubre de 2023

Sigue tu destino - Fernando Pessoa

«Y a veces, en mitad de la calle
―por fin sin que reparen en mí―
me detengo, vacilo,
busco algo así como una nueva dimensión,
una puerta que dé al interior del espacio,
al otro lado del espacio…»
Sigue tu destino,
riega tus plantas,
ama tus rosas.
El resto es la sombra
de árboles ajenos.
 
La realidad
siempre es más o menos
lo que deseamos.
Sólo nosotros somos siempre
iguales a nosotros mismos.
 
Suave es vivir solo.
Grande y noble es siempre
vivir simplemente.
Deja el dolor en las aras
como exvoto a los dioses.
 
Ve de lejos la vida.
Nunca la interrogues.
Ella nada puede
decirte. La respuesta
está más allá de los dioses.
 
Pero serenamente
imita al Olimpo
en tu corazón.
Los dioses son dioses
porque no piensan.
Ricardo Reis (Fernando Pessoa, Lisboa, 1888-1935),
versión de Rodolfo Alonso.
¡Germi te amo mucho!
¡Gracias por estar en mi vida!